Este método tiene su base en los efectos que provoca en la mujer la progesterona durante su ciclo, que influye directamente sobre la temperatura basal del cuerpo. Ésta hace que exista una diferencia de temperatura entre los dos ciclos, la fase folicular y la fase lútea.
En la fase folicular (1ª fase del ciclo), la temperatura basal se sitúa medio grado centígrado (0.5 ºC) más baja que la fase lútea. Esta diferencia ayuda a determinar aproximadamente cuándo va a ser el momento de la ovulación.
En resumen, existe un mínimo térmico antes de la ovulación, previamente con aumento de temperatura. Ahora bien, para determinarlo serán necesario los siguientes requisitos:
- La toma de temperatura será siempre a la misma hora cada día
- La toma se realiza justo al despertar del sueño antes de cualquier actividad física o mental
- El termómetro que se use debe ser siempre el mismo
- Debe de existir un registro (además de las anotaciones de la temperatura) de posibles incidencias (enfermedad, cambio de turno laboral, insomnio, jetlag, hábitos alimenticios, dietas, etc…).
A partir de aquí, hay que ir trazando cada día una línea en la gráfica en base a los puntos que hayamos marcado la temperatura:
¿Cómo se interpreta esta gráfica?
La interpretación de la gráfica de temperaturas una vez las hemos anotado durante el ciclo puede realizarse con 2 métodos distintos:
- Método de línea básica: es lo que se en la imagen. Se traza una línea por encima de todos los puntos de la temperatura (se pueden descartar aquellos que sean excepcionales, p.ej un día de fiebre a 39ºC) que comprendan desde el 5º día del ciclo hasta el final. Para determinar el período fértil, tendremos que fijarnos en 5-6 días de temperatura baja (marcadas por la línea rosa), y luego 3 días de temperaturas altas (que es lo que se observa a partir del día 16). A partir del 3er día en que la temperatura está por encima de la línea, se considerará período infértil postovulatorio. Los días de color rojo corresponden a los de máxima fertilidad.
- Método de Arbeitsgruppe: es un poco más complejo. Considera que el período de infertilidad postovulatorio (en el cuál se podrían establecer relaciones sexuales con coito sin problema) es el que viene comprendido a partir del 3er día de alta temperatura. Para saber cuándo es exactamente este tercer día, se identifican 3 temperaturas altas que sean seguidas y que previamente estén por encima de 6 temperaturas bajas seguidas. Para asegurarse de que estamos en un período de infertilidad, hay que mirar estas 3 temperaturas altas y compararlas con la línea puesto que deberían estar a dos décimas de grado por encima. Si observamos que el día 3 (de altas temperaturas) no está a más de dos décimas de grado, entonces hay que esperar al 4º o 5º día que, seguramente ya superen esas dos décimas e indiquen el inicio del período infértil o postovulatorio.
¿Qué ventajas e inconvenientes tiene el método de temperatura basal?
Como principal ventaja es que es más fiable que el método del calendario, si se hace correctamente, además de ser una técnica barata, pues no se requiere de instrumentos o aparatos adicionales, salvo el termómetro.
Lo malo es que sirve para orientar e identificar el momento de la ovulación pero no predice cuando va a suceder exactamente. Para ello, hay que completar varias gráficas en los primeros ciclos para obtener la información que se necesita, adquirir los conocimientos necesarios y acostumbrarse a los estrictos horarios de la toma de temperatura.
Los período de abstinencia asciende a 15 días por ciclo con lo que la relación de pareja puede verse deteriorada.